vem. Muchos peregrinos de todos los rincones del mundo llegan a visitar el Santuario Original a diario. Para unos es un milagro estar ahí, para los que ya han estado aquí es como que nunca se hubieran ido. En días pasados llegaron dos familias de Ecuador justo antes de la bendición de la noche en el Santuario Original. Fue una gran sorpresa para ellos encontrarse con el P. Egon Zillikens, quien tuvo a cargo la bendición esa noche y que vivió por muchos años en Ecuador.
Durante la bendición el P. Egon pidió a los peregrinos de Ecuador que canten en castellano.
Las banderas de las Aliadas y de la Juventud Universitaria de Guayaquil estuvieron sobre el altar del Santuario junto con una imagen de la Virgen Peregrina que ha acompañado a estas familias en eventos importantes vividos recientemente.
Ella interviene cada día
Al preguntarles qué significó esta peregrinación para ellos, dijeron: “Ahora que podemos mirar para atrás vemos claramente como Ella interviene cada día y a cada instante. No hay duda de que Ella nos preparo para este viaje a cada uno, cada corazón fue atendido personalmente por Ella, poniéndole y quitándole lo que era necesario para estar listos para encontrarnos en Schoenstatt”.
Un juego de niños
En cada persona que llega hasta este lugar de gracias se puede percibir una verdadera entrega y un vínculo afectivo y efectivo a la persona de la Santísima Virgen, pero también a Dios y su voluntad. Así lo confirma lo que estos visitantes dicen con convicción: “Dios todo lo hace perfecto y tiene el tiempo y el lugar adecuado para cada uno, esa es una verdad absoluta, frente a eso…solo hay que dejarse educar y ofrecer lo que nos cuesta…todo lo demás es un juego de niños, y ¡hay que estar dispuestos a jugar como niños!”.
Para seguir llevando adelante el misterio de Schoenstatt a muchas personas más
Una de las hijas comentó unos días después: «¡Fue muy lindo el haber podido ir en un grupo grande donde todos eramos familia ya que teniamos todos el mismo objetivo! Agradecerle a la Reina por todo y pedirle fuerzas para seguir llevando el misterio de Schoenstatt a muchas personas y lugares mas!».
