BRASIL, Ana Beatriz Dias Pinto •
Faltando prácticamente una semana para el inicio de la Cuaresma, el próximo 17 de febrero, se acentúa la polémica en torno a la Campaña Fraternidad 2021 (CF-2021). Es parte de la programación de la Iglesia Católica por un período de 40 días (que comienza el Miércoles de Ceniza y termina en Semana Santa, de ahí el origen del nombre Cuaresma) y existe desde 1964, cuando fue creada por la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil, la famosa CNBB, por sus siglas en portugués. —
En general, la Campaña de Fraternidad tiene como objetivo llevar al pueblo católico a reflexionar sobre algún problema concreto de Brasil en las áreas de salud, medio ambiente y familia, entre otras.
Además, cada cinco años, su propuesta no es solo católica sino ecuménica, es decir, cuenta con el apoyo y el compromiso de varias otras Iglesias que comprenden la importancia de la comunión y el intercambio de experiencias, así como de gestos concretos. Cuenta así con el aval del Consejo Nacional de Iglesias Cristianas, CONIC.
Además de ser una importante herramienta de capacitación y participación, una campaña de fraternidad ecuménica brinda oportunidades para el diálogo entre diferentes convicciones y puede ser el mejor escenario para construir una verdadera cultura de paz.
Sin embargo, aún no ha comenzado ¡y ya provoca polémicas!
Controversias en un momento de división y euforia
Como fruto del delirio colectivo provocado por el extraño contexto político en el que se encuentra Brasil, sumado a la antigua división entre conservadores y progresistas que ha persistido desde el final del Concilio Vaticano II (1962-1965), era de esperarse que hubiese críticas a la Campaña de Fraternidad 2021. Después de todo, invita a la verdadera conversión, algo que un cristiano, más de nombre que de obras, es capaz de ver.
Al pretender educar para la vida en fraternidad, basada en la justicia y el amor, principio central del Evangelio, la Campaña de Fraternidad 2021 chocó a muchos. ¿Y cuál es el motivo de tanto revuelo? Muy sencillo: invita a las “comunidades de fe y personas de buena voluntad a pensar, evaluar e identificar caminos para la superación de las polarizaciones y la violencia que caracterizan el mundo actual”, según señala en su texto básico.
Cuando se habla de la superación de polarizaciones, la propuesta de la CF 2021 es justamente la que provoca la reacción de un cristiano disfuncional (aquel que ama provocar un escándalo y llama comunista a todo el que habla del problema social o de la pobreza dentro del ámbito teológico). Esto es lo que motiva sus ataques contra el ecumenismo.
Tal comportamiento conduce a una ola de otras acciones, que van desde la producción de noticias falsas (fake news) y contenidos que intentan desacreditar a los miembros del CONIC (Consejo Nacional de Iglesias Cristianas de Brasil), hasta el rechazo y crítica descontrolada de importantes movimientos que promueven la unidad, además de desenfrenados ataques a la CBNN.
Ejemplo de lo anterior es el vídeo “Descubre quién está detrás de la Campaña de Fraternidad” divulgado por el Centro Don Bosco de Rio de Janeiro: un arma para la propagación de odio y calumnias infundadas que nada tiene del carisma salesiano. Es un material digno de rechazo, pues llama a la desunión.
En otras palabras, mientras quienes esperan los cambios hacen campañas de fraternidad, los opositores inician una contra campaña, haciendo un flaco servicio que revela el deseo intencional de dividir aún más al pueblo en lugar de unirlo.
¿Qué hacer en medio de tanta desunión?
Quedarse en la burbuja es mucho más cómodo para quienes evaden la vivencia práctica del Evangelio, refutando el hecho de que la sociedad brasileña ha visualizado los problemas más graves en las áreas de salud, economía, política y tantas otras… El “comodismo” y el egoísmo no permiten ver y sentir al otro, pues para una acción concreta, es necesario despojarse; salir de las estructuras, ideologías, proselitismos y también de sí mismo.
Irónicamente, la propuesta de la CF de este año es la solución del problema de tanta falta de unidad. El tema escogido fue: “Fraternidad y Diálogo: compromiso de amor” y el lema “Cristo es nuestra paz: de lo que era división, hizo unidad”. (Ef., 2,14). Para la sociedad brasileña actual, no habría nada más asertivo, pues trae muchos aspectos positivos. La cita es “de ambos pueblos, hizo uno”
¿Qué otros aspectos positivos tiene la Campaña de Fraternidad 2021?
Los temas abordados en las CF dan testimonio de la sintonía de la Iglesia con la vida de la gente, especialmente de la percepción de los grandes problemas que afectan, sobre todo, a los pobres, quienes no siempre tienen a quién acudir en su sufrimiento por situaciones injustas.
Y esto es precisamente lo que molesta a quienes viven una religión descontextualizada de la realidad. Después de todo, un pueblo que cuestiona el hambre, la miseria y la violencia puede despertar, pensar y actuar de manera orgánica, además de comunitaria. Es eso lo que indigna: el pueblo inerte y masivo es manipulable. Además, es fácil llamar socialista, marxista o comunista a quien piensa de esta manera y generar el temor a la excomunión, al desajuste con la jerarquía de la Iglesia.
¡No debemos confundir propuesta de fraternidad con contextos políticos! Estamos en 2021.
Y, a pesar de ser realidades límites, vivimos una eclesiología increíble de construcción y de compartir. De hecho, es importante separar bien las cosas: la fraternidad propuesta por la Campaña de Fraternidad es la del Evangelio, basada en la palabra de Cristo, y no de la boca para afuera de los revolucionarios medievales llamando a las Cruzadas a través de Internet.
Veamos otros de los objetivos y aspectos positivos de la Campaña de Fraternidad de este año:
- Denunciar la violencia contra las personas, los pueblos y la Creación, especialmente de aquellos que usan el nombre de Jesús
- Fomentar la justicia para restaurar la dignidad de las personas, superar los conflictos y lograr la reconciliación social
- Fomentar la participación en acciones concreta de amor con el prójimo
- Promover la conversión a una cultura del amor en lugar de la cultura del odio
- Fortalecer y celebrar la convivencia ecuménica e interreligiosa.
¿Quiere saber más sobre la Campaña de Fraternidad 2021?
Si quiere profundizar sus conocimientos sobre la CF 2021, la editorial Edições CNBB ha preparado una página con tres video clases, además de poner a disposición en su sitio web el texto base y varias materias. El contenido es presentado por el secretario ejecutivo de campañas de la CNBB, el P. Patriky Samuel Batista, de manera didáctica, ágil, clara y objetiva, lo que favorece la comprensión del tema.
Para verlo (en portugués), visite: https://campanhas.cnbb.org.br/canal/cf2021
Ana Beatriz Dias Pinto es comentarista y aporta reflexiones sobre temas actuales y contextualizados desde la perspectiva del universo religioso, aportando su conocimiento y experiencia en el tema de Teología y Sociedad para ampliar nuestra comprensión de lo sagrado y sus interrelaciones. Es periodista, teóloga, maestra y estudiante de doctorado en Teología, profesora del Studium Theologicum Claretiano afiliado a la Pontificia Universidad Lateranense de Roma y al monasterio de la Orden de San Basilio Magno en Curitiba/PR. Miembro del NEIR – Núcleo Ecuménico Inter-Religioso de la Pontificia Universidad Católica do Paraná – PUCPR.
Fuente: www.bemparana.com.br
Original: portugués; traducción: Carmen M. Rogers/es, Santiago, Chile
Nota de la redacción:
Los 35 comentarios que hemos recibido en menos de 24 horas en la versión portuguesa de este artículo nos han dejado boquiabiertos. Nunca habíamos recibido tantos, en tan poco tiempo y en portugués. Pero lo que realmente nos impresionó fue el odio a la Conferencia Episcopal Brasileña, a la Iglesia posconciliar y al ecumenismo, a schoenstatt.org y a la autora (del Schoenstatt no organizado), que fue y es literalmente vociferada por los comentaristas del Movimiento de Schoenstatt. La respuesta solo puede ser: Fratelli tutti y alianza solidaria con los obispos brasileños.
Nota de la redacción 2 (18.02.2021)
Compartimos, con gran alegría, el saludo del Papa Francisco para Campaña de la Fraternidad 2021
Mensaje del Santo Padre
Queridos hermanos y hermanas de Brasil,
Con el inicio de la Cuaresma, estamos invitados a un tiempo de intensa reflexión y revisión de nuestras vidas. El Señor Jesús, que nos invita a caminar con Él por el desierto hacia la victoria pascual sobre el pecado y la muerte, se hace peregrino con nosotros también en estos tiempos de pandemia. Nos convoca e invita a rezar por los que han muerto, a dar gracias por el servicio desinteresado de tantos profesionales de la salud y a fomentar la solidaridad entre las personas de buena voluntad. Nos llama a cuidar de nosotros mismos, de nuestra salud, y a preocuparnos los unos por los otros, como nos enseña la parábola del Buen Samaritano (cf. Lc 10,25-37). Tenemos que superar la pandemia y lo haremos en la medida en que seamos capaces de superar las divisiones y unirnos en torno a la vida. Como he indicado en la reciente encíclica Fratelli tutti, «pasada la crisis sanitaria, la peor reacción sería la de caer aún más en una fiebre consumista y en nuevas formas de autopreservación egoísta» (n. 35). Para que no sea así la Cuaresma nos es de gran ayuda, ya que nos llama a la conversión mediante la oración, el ayuno y la limosna.
Como es tradición desde hace varias décadas, la Iglesia en Brasil promueve la Campaña de la Fraternidad como una ayuda concreta para vivir este tiempo de preparación a la Pascua. En este año 2021, con el tema «Fraternidad y diálogo: compromiso de amor», se invita a los fieles a «sentarse a escuchar al otro» y superar así los obstáculos de un mundo que a menudo es «un mundo sordo». De hecho, cuando nos disponemos a dialogar, establecemos «un paradigma de actitud receptiva, de quien supera el narcisismo y recibe al otro,» (ibíd., n. 48). Y, en la base de esta renovada cultura del diálogo está Jesús que, como enseña el lema de la Campaña de este año: «Es nuestra paz: el que de los dos pueblos hizo uno» (Ef 2,14).
Por otra parte, al promover el diálogo como un compromiso de amor, la Campaña de Fraternidad nos recuerda que los cristianos son los primeros que tienen que dar ejemplo, empezando por la práctica del diálogo ecuménico. Con la certeza de que «tenemos que recordar siempre que somos peregrinos, y peregrinamos juntos», en el diálogo ecuménico podemos realmente «hay que confiar el corazón al compañero de camino sin recelos, sin desconfianzas, y mirar ante todo lo que buscamos: la paz en el rostro del único Dios» (Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium, n. 244). Es, por tanto, un motivo de esperanza que este año, por quinta vez, la Campaña de la Fraternidad se lleve a cabo con las iglesias que forman parte del Consejo Nacional de Iglesias Cristianas de Brasil (CONIC).
De este modo, los cristianos brasileños, en fidelidad al único Señor Jesús que nos dejó el mandamiento de amarnos los unos a los otros como él nos amó (cf. Jn 13, 34) y a partir «de la valoración de cada persona humana como criatura llamada a ser hijo o hija de Dios, ofrecen un aporte valioso para la construcción de la fraternidad y para la defensa de la justicia en la sociedad» (Carta Encíclica Fratelli tutti, n. 271). La fecundidad de nuestro testimonio dependerá también de nuestra capacidad de dialogar, de encontrar puntos de unión y de traducirlos en acciones a favor de la vida, especialmente de la vida de los más vulnerables.
Deseándoos la gracia de una fructífera Campaña de Fraternidad Ecuménica, os envío a todos y cada uno de vosotros mi bendición apostólica, pidiéndoos que no dejéis de rezar por mí.
Roma, San Juan de Letrán, 17 de febrero de 2021.
Franciscus PP.
El Santo Padre, pastor supremo del pueblo de Dios , apoya directamente esta iniciativa de fraternidad de la Iglesia en Brasil:
https://www.vaticannews.va/es/papa/news/2021-02/mensaje-papa-francisco-obispos-brasil-campana-cuaresma.html
El que tenga oídos: que oiga.
Bendecida Cuaresma!
Muchas gracias Alejandro. Dilexit ecclesiam. Schoenstatt es iglesia, y es llamado a servir a la iglesia.
Sinceramente, leer estas cosas como el presente artículo en un portal con el título de Schoentatt.Org me aleja, y mucho, del movimiento. Me hace vislumbrar que el desnortamiento doctrinal de muchos (¿?) dentro del movimiento no solo se da en Alemania, como pude comprobar en varias largas estancias en aquel país. Mi prioridad es defender a los que la Providencia ha puesto a mi cargo. Rezo al Señor y a la Mater por todos los que pertenecemos al movimiento, para que sepamos profundizar en la humildad de corazón. Son tiempos difíciles. Semper fidelis.
(1) Una Iglesia que, por una parte, está llena de alma hasta en lo más profundo y arraigada en la tradición; pero, por otra, una Iglesia que es extraordinariamente libre, desprendida de formas tradicionales anquilosadas.
(2) Es una Iglesia unida en virtud de una fraternidad que cala muy hondo, pero a la vez dirigida y gobernada jerárquica, más aún, paternalmente.
(3) Es una Iglesia depositaria de la misión de convertirse en alma de la cultura y del mundo presente y futuro.
Pregunta: ¿Cita de los obispos de Brasil?
REspuesta: no. Del P Kentenich. ¿Seguimos a el?
Felicito a la autora Ana Beatriz Dias Pinto y a Schoenstatt.org por publicar este artículo.
Hay una sola forma de ser Iglesia, y esto es con el Santo Padre y los Obispos.
El Papa Francisco nos mueve a convertir el corazón a Dios y a los hermanos con un profundo espíritu cristiano.
No debemos cerrarnos en ideas. Debemos crecer en el AMOR, la FRATERNIDAD, EL ESPIRITU COMUNITARIO.
Amar a Dios y amar al prójimo. Toda la Ley está encerrada en esos dos mandamientos, dijo Jesús.
Mt. 22, 38-39
¡Muchas gracias nuevamente!