CHILE, Octavio Galarce Barrera •
El compromiso y la vocación laical es parte importante del contenido que desarrolla el Padre Kentenich en una reciente publicación de Editorial Patris, que fue publicada hace poco en coedición con la Federación de Hombres de Chile. Para saber algo al respecto, nos contactamos con José María Fuentes, Jefe de la Federación de Hombres, y le pedimos que nos contara más detalles sobre este libro.
¿De dónde surge este interés de la Federación de Hombres por textos del Padre Fundador, si ya hay tanto material disponible?
– Efectivamente, por el esfuerzo constante de la Editorial Patris, la Editorial Schoenstatt, los Padres de Schoenstatt de Argentina y otras personas, durante los últimos decenios, existe bastante material del Padre Kentenich traducido al español. A pesar de ello, existe poco material del Padre referido a la vocación laical.
¿Por qué eligieron estos textos del Padre Kentenich y cuál es la importancia que tienen para ustedes?
– Hemos estado buscando, seleccionando y traduciendo textos del Padre sobre la vocación laical. Uno de los textos más largo del Padre Kentenich sobre la vocación laical se encuentra en el retiro que predicó a sacerdotes diocesanos en el año 1931, en Schoenstatt, titulado “Vocación sacerdotal y vocación laical”. Ese es el contenido del libro que se acaba de publicar en español.
Para la Federación de Hombres y para toda la Columna de Hombres, el tema de la vocación y la misión laical es un tema central. La evangelización del mundo profano, incluyendo en una forma muy especial el mundo del trabajo, es un elemento central de nuestra vocación. Tal como otros acentúan el mundo más íntimo de la familia como su carisma especial, nosotros acentuamos la participación, con el Señor, en la construcción del mundo.
¿Qué es lo más “novedoso” que encontrará el lector en este libro?
– En sus páginas el Padre Kentenich desarrolla con profundidad muchos temas. Elementos centrales son la vocación laical y la vocación sacerdotal. También hace una larga reflexión sobre la vocación y el aporte de la mujer.
El Padre profundiza en el origen y el valor de la vocación laical, que es un llamado a participar de la misión de Cristo como sacerdote, profeta y pastor. El laico participa como sacerdote ofreciendo su propia vida y toda su actividad diaria en la vida de trabajo y en el esfuerzo de todos los días. Participa como profeta evangelizando la cultura en esta misma actividad, haciendo presente la voluntad de Dios frente al acontecer del mundo. Participa como pastor haciéndose responsable del prójimo, sirviéndolo y ayudándolo a desarrollarse; ejerciendo su señorío sobre el mundo creado, haciendo que éste esté al servicio de los hombres y de la gloria de Dios.
El libro es, también, una posibilidad de renovación y profundización para quien está llamado a la vocación de ministro ordenado: obispo, presbítero o diacono. Le permite profundizar en el misterio de la propia elección y en el especial contenido de ella. Como todo cristiano, está llamado a ser parte del Cuerpo Místico de Cristo. Como ministro ordenado, participa, de una forma especial, con Cristo como cabeza de su Cuerpo Místico.
En la última parte del libro, el Padre desarrolla “lo eterno y divino en la mujer, encarnado con toda pureza en la Sma. Virgen”, en que expone su visión sobre la misión de la mujer.
¿Tienen pensado publicar otros textos?
– Sí. Ésta es una primera publicación sobre el tema laical. Estamos trabajando otros textos sobre el mismo tema.
Fuente: Revista Vínculo, Noviembre de 2016
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