FRANCISCO EN ROMA •
Ángelus del Papa en la Jornada mundial del emigrante y del refugiado; en un clima cada vez más dificil para los refugiados y aquellos que sienten llamados a acogerlos.
Francisco les saluda a los cerca de seis mil inmigrantes provenientes de diversas regiones de Italia, de treinta nacionalidades diferentes, que se dieron cita en la plaza de san Pedro para participar en el Ángelus, y que además, una vez finalizado, pasaron por la Puerta Santa y celebraron la Santa Misa.
Les pide que, a pesar de las dificultades de su camino vital «no se dejen robar la esperanza ni la alegría de vivir». También solicita oraciones por las víctimas de los atentados terroristas de indonesia y Burkina Fasso, al tiempo que recuerda que Dios «no es un juez pronto a condenar ni un comandante que nos impone seguirle ciegamente».