Publicado el 2020-04-25 In Francisco - iniciativas y gestos

No recibir, sino donar: el Papa Francisco regala material sanitario por su santo

VATICANO, Redacción •

23 de abril, fiesta de San Jorge, día del santo de Jorge Mario Bergoglio, Papa Francisco. ¿Qué hace el Papa para celebrar su onomástico en plena pandemia? En la misa matutina, reza por las familias con hijos a quienes les falta dinero y comida en estos tiempos. Después dona, en vez de recibir: dona respiradores a Rumania, Italia y España. En estos tiempos de tanta demanda – que llegue más apoyo del estado, que se nos “devuelvan” las misas, que nos dejen salir a la calle, que bajen los impuestos, que se entreguen mascarillas gratis, que, que, que…  – el Papa Francisco dona. Con alegría. —

Su oración en la misa matutina dirige nuestra mirada a las familias necesitadas – familias como las de los jóvenes de Casa Madre de Tupãrenda en Paraguay, la Casa del Niño José Kentenich en Florencio Varela y la Casa del Niño María de Nazareth en Villa Ballester, Argentina, María Ayuda en Chile, Dequeni en Paraguay, familias como las que Juan Ramírez, de Ciudad del Este, Paraguay, junto a la Cámara de Comercio ayuda eficientemente.

 

Entrega de comida para familias carenciadas: Dequeni, Paraguay

Francisco reza:

“En muchas partes se siente uno de los efectos de esta pandemia: muchas familias necesitadas, hambrientas y lamentablemente, el grupo de usureros que les está ayudando. Esta es otra pandemia. La pandemia social: familias de personas que tienen un trabajo diario o, por desgracia, un trabajo no declarado, que no pueden trabajar y no tienen comida… con hijos. Y luego los usureros se llevan lo poco que tienen. Oremos. Recemos por estas familias, por los muchos hijos de estas familias, por la dignidad de estas familias, y recemos también por los usureros: que el Señor toque sus corazones y los convierta”.

Un abrazo del Papa en una situación difícil para todo el mundo

En el día de su onomástico, el Santo Padre hizo una donación de respiradores, equipo médico y material para cuidados intensivos: máscaras, antiparras protectoras para los médicos y enfermeros, guantes quirúrgicos, entre otros materiales.

Los regalos se entregaron a partir del 23 de abril a hospitales de la ciudad de Suceava, Rumania, lugar de un brote de coronavirus en el país, donde se esperan cinco respiradores de última generación; otros dos irán al hospital de Lecce, Italia, y 3 a Madrid, España.

«Un signo bellísimo que cae en este día particular en el cual el Santo Padre no recibe un regalo, sino que lo dona a otros”. Así el cardenal Konrad Krajewski, limosnero apostólico, relató a VaticanNews la inminente entrega que define como “un abrazo del Papa en una situación difícil para todo el mundo”.

“Rumania está experimentando una verdadera emergencia. En la pequeña ciudad de Suceava, ubicada al noreste del país, donde irán los respiradores, hay casi un 25 % del contagio total a nivel nacional. La ciudad, que está situada en la región más pobre del país y de la Unión Europea, junto con varios municipios de los alrededores, está en cuarentena”.

En Rumania hay más de 527 víctimas y casi 10 mil infectados. Los respiradores y todo el material donado por el pontífice serán transportados por un vuelo en el que viajará también un equipo de once médicos rumanos y seis trabajadores sanitarios, enviados el 7 de abril por el gobierno de Bucarest al hospital de Lecco para trabajar junto a Italia en el momento más duro de la batalla contra el coronavirus, informó el Vaticano.

De “café pendiente” a “medicina pendiente”

De los tres respiradores de Madrid se ocupará la Nunciatura que, junto con el cardenal Carlos Osoro Sierra, arzobispo de la capital española, dispondrá el destino a los hospitales más sufridos. El país ibérico está en confinamiento hasta el 9 de mayo, el número de infectados supera los 208.000, los muertos son más de 21.000 y casi 86.000 los que se han curado del coronavirus.

Dos respiradores para el hospital de Lecce fueron entregados el 23 de abril por el propio cardenal Krajewski. En el viaje de regreso al Vaticano, el Limosnero se detendrá en Nápoles para recibir las medicinas para los pobres de Roma. «Como el ‘café pendiente’ – explica el cardenal – la arquidiócesis ha promovido la medicina pendiente y para agradecer la cercanía del Papa, durante la emergencia del coronavirus, han preparado medicamentos para los pobres de Roma».

Entrega Hospital San Rafael de Madrid. Tres respiradores, además de la maquinaria necesaria para la respiración asistida, mascarillas y gafas protectoras para el personal sanitario de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI)

 

Querido Papa Francisco, ayer, al enterarme de esta donación, me pregunté: ¿qué regalarle a usted para el día de su santo? Encontré la respuesta. El destino de mi regalo está en aquel libro que el padre Pedro Kühlcke le regaló.

 

Con material de AICA, Argentina, y Religión Digital, España

“Extraño la comida de Casa Madre de Tupãrenda” – Denles ustedes de comer (Mc 6,37)

Etiquetas: , , , , , ,

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *