Publicado el 2015-12-10 In Dilexit ecclesiam

El Consejo General de los Padres de Schoenstatt visitó el templo de San Salvatore in Onda

ROMA, ITALIA, via sac.info, Casa Generalizia della Società dell’Apostolato Cattolico •

El miércoles 2 de diciembre toda la Familia Palotina de Roma se reunió en torno del altar de San Vicente Paloti para orar en común. Fue un momento especial, porque junto con los sacerdotes, Hermanos, Hermanas Palotinas y miembros de la Sociedad del Apostolado Católico, estaban presentes el superior general de los Padres de Schoenstatt, P. Juan Pablo Catoggio, y los miembros del consejo general elegidos el pasado 22 de agosto de 2015.

La Sta. Misa fue presidida por el P. Martín Manus, SAC, consejero general. En sus palabras de bienvenida, el rector general, P. Jacob Nampudakam SAC, recordó que San Vicente Pallotti fue un profeta de la comunión. Y es responsabilidad de todos el continuar ser instrumentos de una comunión basada en el amor de Cristo. La celebración eucarística fue un momento adecuado para reconocer los muchos rasgos de la herencia espiritual común dejada por San Vicente Pallotti, y de expresar la disponibilidad de todos para fortalecer los lazos de amistad y de compromiso con la misión de la Iglesia.

Al finalizar la Sta. Misa, el P. Juan Pablo Catoggio agradeció la invitación para rezar en común y consideró que San Vicente Pallotti es un profeta de la nueva evangelización. Pedimos por la intercesión de María, la Reina de los Apóstoles, y de San Vicente, que la misión que fue confiada a los Padres de Schoenstatt y a la Sociedad del Apostolado Católico, dé frutos abundantes para nuestras comunidades y para toda la Iglesia.

Fuente: www.sac.info, con cordial autorización de los editores.

Más fotos

Original: Italiano. Traducción: aat, schoenstatt.org

Etiquetas: , , , , , , , ,

1 Responses

  1. Juan Enrique Coeymans Avaria dice:

    Bendito sea DIos que permite ir viendo los frutos de reconciliación y de unidad con los Pallottinos. San Vicente Pallotti es el Precursor de Schoenstatt y a el le debemos nuestro tercer fin.
    La historia de desencuentros, incomprensiones, y pequeñez humana debe ir dando paso a una historia en que San Vicente vuelva a tener el lugar que nuestro fundador soñó y pensó dentro de la Obra de Schoenstatt. Nunca seremos lo fecundos que Dios espera de nosotros, mientras no recuperemos a San Vicente en nuestra Familia, y nos hagamos cargo también del tercer fin, la Confederación Apostólica Universal.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *