bolsas de caridad

Publicado el 2023-03-17 In Obras de la misericordia, Proyectos

La ayuda que lleva un plato de comida a nuestros hogares

ECUADOR, Maria Fischer •

“Yo me siento agradecida primeramente con Dios y con la Iglesia y con las personas que donan aquí. Espero que nos sigan ayudando porque para nosotros es una gran ayuda, porque no tenemos trabajo. Gracias a Dios y a las personas que están haciendo esto, también a usted, padre”, dice una de las muchas personas que la semana pasada recibió, como todos los meses desde el inicio de la pandemia, su bolsa de caridad. —

Es la obra social del Santuario de Schoenstatt de Quito – así dice el titulo del video que el P. Rafael Amaya difunde entre bienhechores y aliados de este proyecto.

Es la obra social del Santuario de Schoenstatt de Quito – así dice el titulo del video que el P. Rafael Amaya difunde entre bienhechores y aliados de este proyecto. Hay que decir que no es la única obra social de este santuario – pensamos en todo lo que se hace para los niños del barrio mas pobre cerca del santuario y para sus familias -, pero este titulo tan sencillo como categórico hace pensar: ¿Qué es la obra social de nuestro santuario, de nuestra ermita? En el santuario de Santa Cruz do Sul en Brasil es el rosario de alimentos, algo semejante se hace en la ermita de Goya, Argentina; el Santuario de Sión de los Padres de Schoenstatt en Florencio Varela, Argentina, tiene la Casa del Niño, Tuparenda la Casa Madre de Tuparenda… ¡Qué interesante estaría una serie de artículos sobre obras sociales de nuestros santuarios y ermitas!

De vuelta a Quito. Escuchamos al testimonio de otra beneficiada:

“Agradezco de todo corazón porque nuevamente nos han ayudado mucho. Y usted que nos brinda cada mes la ayuda para que a nuestros hogares llegue un plato de comida, un bocadito a nuestros niños, a nuestros adolescentes, a nuestros adultos mayores. Me siento tan contenta que no hay palabras para decirlo, demostrar los sentimientos y agradecer el día de la misa todos los domingos, el espíritu se cambia por dentro, el alma queda tranquila todos los domingos para tener una buena semana”.

«Queremos hacer vida el llamado del Papa Francisco a que las palabras se noten en nuestras obras» dice el P. Rafael.

Colaboración: Tita Andras, Viena, Austria

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