ARGENTINA, P. Sebastián Zagari, vía www.schoenstatt.org.ar •
El jueves 18 de noviembre, en la ciudad de San Pedro (Buenos Aires), perteneciente a la diócesis de San Nicolás, vivimos un momento de gracia al celebrar la Misa junto a la imagen de la Mater en la ermita que nos acompaña desde hace 17 años. —
Esta ermita fue realizada por un grupo de misioneros de la Campaña de la Virgen Peregrina, con el aporte de muchos devotos, y fue bendecida por el P. Guillermo Cassone el 9 de noviembre de 2004.
Hacía tiempo que, junto a Élida, coordinadora de la Campaña de la Virgen Peregrina, y las misioneras locales, teníamos el deseo de celebrar una Misa en la ermita, que se encuentra en la hermosa Plaza de La Amistad, en las calles 11 de septiembre y Liniers. Un lugar vital, de encuentro, de compartir, donde mucha gente pasa diariamente, incluso muchos turistas en los fines de semana, un lugar de encuentro de las familias, de juego para los niños, a pocas cuadras del paseo público de la ciudad y del río. Un lugar desde donde María bendice a cada uno de los que, sabiéndolo o no, están cerca de ella.
La Misa, inicialmente prevista para el 9 de noviembre, día del aniversario de la bendición, finalmente fue pospuesta por razones climáticas al 18 de noviembre, día de Alianza y día en que mensualmente los misioneros se acercan a rezar el rosario. Dios nos regaló un hermoso día de sol, bajo el cual nos dirigimos con confianza al corazón de la Virgen.
“Cuando pases por aquí, espero tu mirada”
Como párroco del lugar, tuve el honor de presidir la celebración y en la prédica quise destacar cómo desde esta ermita la Mater conquista los corazones de tantos que pasan cerca de ella. De aquellos que se detienen a rezar, o que simplemente la miran, recordando la frase que don João había puesto en la ermita que erigió junto a su casa:
“Cuando pases por aquí, espero tu mirada. Nada de lo que me pidas te negaré si tu corazón sabe amar”.
También me pareció oportuno recordar que María es Madre y Reina de la unidad, y eso se manifiesta también en cómo ella une a los fieles de San Pedro: la ermita se encuentra en la jurisdicción de la parroquia de San Roque, pero justo en el límite con la parroquia de Nuestra Señora del Socorro, y a su vez las misioneras tienen como referencia a la parroquia de San Pablo. En las tres comunidades de la ciudad la Mater, con su presencia de madre, une los corazones en un solo amor.
Finalmente, comentando el Evangelio del día (Lc 19, 41-44), que relataba las lágrimas de Jesús por la ciudad santa, que no supo reconocer el tiempo en que fue visitada por Dios, le pedimos a Jesús la gracia de poder siempre reconocer su visita con la certeza de que, allí donde está la Virgen, hay una visita de Dios. Y en nuestra ermita, ahí en la Plaza de La Amistad, donde está la Mater, sabemos que siempre tenemos una visita, una caricia, una bendición del buen Dios. En la tarde del 18 de noviembre de este año lo volvimos a experimentar con fuerza, y nos propusimos coronar a la Mater en acción de gracias.
Fuente: www.schoenstatt.org.ar, con permiso de los editores
