CHILE, MADRUGADORES, Octavio Galarce •
“Me deja muy contento vuestra permanencia en el encuentro y la oración” … “…pediré al Señor nos mire y nos bendiga” … “Se levantan muy temprano para orar, hacen una levantada muy temprana para la oración” … “…sigan adelante con las 3 M: Misa – Mesa – Mundo/Misión” … “Rezo por ustedes, y por favor no se olviden de hacerlo por mí” … “Son los Madrugadores”.—
Hoy, sábado 2 de mayo, 300 grupos de oración se unen a nosotros en oración, los llamados «madrugadores»: aquellos que se levantan temprano para rezar, hacen un «madrugón», para rezar. Se unen hoy, ahora mismo, a nosotros.
Les ha pasado a muchos, no soy el único, de buena fuente sé que se repite en muchos lugares del mundo. Son incontables las veces que he leído la carta del Papa a los Madrugadores y escuchado el saludo en la Misa del sábado 2 en la capilla de la Casa de Santa Marta. Todo es importante, pero me resuenan especialmente las frases con las que he querido comenzar esta reflexión a una semana de lo acontecido.
Aún estoy impactado y conmovido por el delicado gesto del Vicario de Cristo, de prestar atención a alguien que desde Chile –el fin del mundo dicen algunos– le hace partícipe de lo que estábamos planificando para hacerle sentir a él, al Papa, nuestra comunión espiritual, usando lo que ahora se nos ha hecho evidente, y que hace posible “viajar” por el “hiperespacio”, y testimoniarle lo que tantas veces ha pedido: que recemos por él y por sus intenciones.
Me comentan algunas personas que han tenido o tienen algún grado de cercanía con el quehacer del Vaticano, que la rapidez con que el Papa respondió no es muy usual, dada la cantidad de demandas similares a la nuestra que le llegan y ni hablar de su ocupación en temas de importancia mundial que copan su agenda día a día. Lo más probable, me acota una persona en estos días, es que con palabras sencillas “ustedes llegaron a su corazón” y él empatizó con aspectos centrales de los Madrugadores, algunos de los cuales el menciona en su carta respuesta.
Repercusiones mediáticas
Una vez terminada la Eucaristía del sábado en Santa Marta, las palabras del Papa comenzaron a generar frutos inmediatos. La nota publicada sobre la Misa de ese día en el sitio oficial Vatican News fue traducida simultáneamente en muchos idiomas en las páginas locales de cada país. María Fischer, a cargo de esta página, me comentó muy entusiasmada que algunos de sus contactos del ámbito de las comunicaciones comenzaban a requerir información sobre este grupo de hombres que el Papa había mencionado por la mañana y que se llamaban Los Madrugadores. A primera hora ya se sabía de publicaciones en Italia misma, Alemania y otros países. También hubo muchas publicaciones en diarios y revistas digitales de Iglesia en varios países. En Chile la noticia fue publicada en el portal www.iglesia.cl de la Conferencia Episcopal de Chile. En Rancagua, donde yo vivo, el portal de la Iglesia diocesana, lo mismo que el diario local “El Rancagüino” también han informado y puesto el acento en que el Papa Francisco ha saludado a los Madrugadores en Misa celebrada en Santa Marta.
Dos hombres me escribieron a mi WhatsApp desde Colombia –Tunja (Boyacá), y de Pitalito (Huila)– interesados en tomar contacto con algún madrugador de su país; habían escuchado al Papa mencionarnos en la misa y se interesaron inmediatamente en participar; luego se sumaron otros tres, también motivados por lo que habían escuchado por la mañana. Hoy los 5 ya están integrados a los Madrugadores de Colombia.
Madrugadores y Schoenstatt
El impacto de las palabras del Papa en su saludo al comienzo de la Eucaristía del sábado 2, ha provocado en nuestras comunidades una necesidad de salir en busca de aquellos hombres que esperan ser invitados a integrarse a nuestras comunidades. Este tiempo de confinamiento, muy por el contrario de lo que se esperaba, ha hecho crecer el compromiso e identidad con nuestros ideales y misión. Son muchos los que han expresado que sólo esperan que se levanten las cuarentanas locales para salir a sembrar de madrugadas…
Para el Movimiento de Schoenstatt ha sido también motivo de profunda alegría lo que ha pasado con esta corriente de vida que surge, en la fuerza de la Alianza, desde un santuario que tiene una impronta laical desde sus inicios. Nacimos en un lugar de gracias que irrumpe en la historia del hombre y de la humanidad, en un lugar en donde el cielo toca la tierra, en un lugar que es Taller donde la Mater forja el hombre nuevo y la hueva comunidad, y lo hace estrechando los vínculos naturales y sobrenaturales. ¡En realidad, no podría haber sido en otro mejor lugar!: el Santuario de la Madre tres veces Admirable.
La peregrinación al Santuario de Rancagua en el marco del encuentro de celebración de los 30 años de inicio de las madrugadas en noviembre del año pasado, Picarquin 2019.
“Gaben sind Aufgaben” = Dones son tareas
Felices, orgullosos, honrados con las palabras del Papa, tal como las resumo al comienzo de esta reflexión, pero no queremos quedarnos sólo con eso… Somos portadores de una Buena Nueva especialmente para los hombres, somos puerta abierta para todo aquel que quiera volver, tal como lo hizo el Hijo pródigo, cuando decide volver a la Casa del Padre, somos una opción para todos aquellos hombres que buscan una comunidad que le permita vivir y crecer en la fe y en su compromiso apostólico, y con otros.
Por eso una vez más, y ahora más confiados que nunca, luego que el Papa, primero nos acogiera más íntimamente a través de su carta enviada el día 29 de abril, y luego, más oficialmente como Iglesia universal en sus palabras pronunciadas en la Misa del 2 de mayo, nos entregamos confiadamente a su promesa: “…pediré al Señor nos mire y nos bendiga” …
La peregrinación al Santuario de Rancagua en el marco del encuentro de celebración de los 30 años de inicio de las madrugadas en noviembre del año pasado, Picarquin 2019.
Los madrugadores hemos recibido una carta ¡del Papa Francisco!
