Cinco años de Casa Madre de Tupãrenda

PARAGUAY, Casa Madre de Tupãrenda, Ricardo Acosta •

Casa Madre de Tupãrenda nace como una respuesta a la reincidencia de los adolescentes en los centros educativos. Dentro de un grupo de personas que realizaba un trabajo solidario en el Centro Educativo Itauguá (CEI, cárcel de jóvenes), el padre Pedro Kühlcke ejerció como voluntario, luego como capellán y vieron la necesidad de ofrecerles a los que salen del centro un lugar donde puedan trabajar su personalidad y aprender algún oficio para reinsertarse plenamente en la sociedad. —

FUNDAPROVA es el cuerpo jurídico que ejecuta este programa con la supervisión de los padres de Schoenstatt. Esta fundación nació en Encarnación con la misma finalidad, pero es en el año 2015 en Tupãrenda cuando encuentra su verdadera misión.

Fue durante un retiro, cuando el padre Pedro lanzó el desafío a los presentes de sumar más personas a la merienda de los sábados en el CEI y muchos se incorporaron, entre ellos Ana Mendoza de Acha, el matrimonio Lourdes y Dr. José Marín y la Sra. Gisela Fiorio, entre otros. Pero esto no fue nada fácil, porque de la idea a la realidad había que trabajar muchísimo. Esta propuesta le llega a la entonces ministra de justicia, la Dra. Sheila Abed que, junto a la Dra. Carla Bacigalupo impulsan y promueven para conseguir los fondos y lograr la construcción de la anhelada casa en el año 2016.

El 12 de febrero de 2016 se coloca la piedra fundamental para iniciar la construcción de la casa. Ese mismo año, el 1 de agosto ingresan los primeros participantes y el 22 de agosto tuvo lugar la bendición.

Poner en marcha el funcionamiento de la casa trajo grandes desafíos, de preparación, aprendizaje y experiencia. El prototipo inicial del programa fue lo aplicado por la Fundación Paternitas de Chile. Esto necesariamente fue adaptado a la realidad socioambiental de Paraguay.

P. Pedro Kühlcke,  Fabian, Alfredo Mongelos (Sinafocal), Min. de Justicia Carla Basigalupo, Brain y Dr. José Marin

Después de cinco años…

Hoy después de cinco años de funcionamiento y gracias al apoyo y financiación del Ministerio de Justicia inicialmente, y actualmente con el respaldo del Ministerio del Trabajo a través de Sinafocal (Sistema Nacional de Formación y Capacitación Laboral de Paraguay), hemos logrado dar grandes pasos y brindar oportunidades a muchos jóvenes. Hoy suman 41 los participantes que llegaron a la meta y concluyeron el programa. La mayoría de ellos hoy insertados laboralmente. Tres de los cuarenta y un graduados reincidieron lamentablemente, es decir, se visualiza el 93% de efectividad frente al 7%. Existe otra cantidad importante que no concluyeron los nueve meses del programa, pero sí lograron, gracias al proceso, reenfocar sus proyectos de vidas y tomar mejores horizontes.

El programa tiene como centro el fortalecimiento del individuo y su entorno, generando a través del desarrollo de vínculos significativos un espacio en el que cada cual puede descubrirse, valorarse y recuperar o desarrollar la confianza en sí mismo, en otras personas y en su ambiente.

Después de cinco años de esta gran hazaña hemos dados unos pasos muy importantes en el marco de la reinserción, gracias al apoyo interinstitucional público-privado. Ya tenemos la experiencia y desafíos trazados; a partir de hoy es reunir más fuerzas y avanzar en pos de brindar a la mayor cantidad de jóvenes este tipo de oportunidades para salir adelante con sus propios medios y con el esfuerzo diario de un trabajo que dignifique sus vidas y las de sus seres queridos.

Video hecho y difundido por Sinafocal

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