ALEMANIA, Christine y Michael Dörrer. Varias familias se reunieron en la Casa de las Familias en Schoenstatt sobre el Monte, Memhölz para participar en un curso básico de formación para niños pequeños (0 – 6 años). El objetivo fue conocer la pedagogía del Padre José Kentenich y obtener consejos prácticos sobre cómo implementarlos con los niños pequeños en la familia y en la formación de la vida diaria.
Mientras los niños estaban bien cuidados, los padres tuvieron la oportunidad de participar en las variadas presentaciones para luego intercambiar lo vivido en conversaciones de pareja y con el resto de las familias participantes.
Para que nuestro hijo pueda crecer…
En primer plano estuvieron sobre todo la pedagogía de confianza y de vinculaciones del Padre Kentenich. En la primera parte aprendimos de los entrenadores de familias Andrea y Bernhard Jehle, lo importante que es la confianza mutua en la relación padres e hijos, para que nuestros hijos sean fuertes y sean capaces de desarrollar la personalidad que Dios tiene destinada para ellos. Nuestra tarea como padres es cuidar a nuestro hijo como se hace con un pequeño árbol, darle todo para que pueda crecer y desarrollarse. Darle sobre todo amor y afecto, límites y libertad como también cobijamiento y seguridad, algo que los niños pueden recibir a través de una relación de amor y armonía de sus padres.
…y encuentre apoyo
En la segunda parte, Regina y Richard Schmucker, también capacitados para ser entrenadores de familia, expusieron el tema sobre la importancia de los vínculos. Tal como un árbol echa sus raíces en la tierra para tener su apoyo, también los niños necesitan vinculaciones sanas que les den seguridad y posibiliten el crecimiento. En los primeros años de vida, especialmente el vínculo a la madre y al padre juegan un papel muy importante. Pero también son importantes el vínculo a las cosas y lugares, a los ideales, rituales y estructuras, ya que sólo así podemos hacer posible que los niños también puedan vincularse con Dios.
Una tarea increíblemente grande
Otro tema central fue la actitud interior en la educación de nuestros hijos. El Padre Kentenich dice: “Educación es servicio a la vida”. Aquí Dios nos asigna una tarea increíblemente grande, pero si tenemos la actitud interior que nuestros hijos son un regalo de Dios, también experimentaremos que él nos ha proporcionado las capacidades necesarias para educar a nuestros hijos.
Todos estos valiosos impulsos, las conversaciones en pareja que se dieron después y los enriquecedores intercambios con el resto de los participantes contribuyeron a un exitoso fin de semana, en el cual todas las familias se sintieron muy a gusto y así pudieron llevarse muchas ideas y lindas experiencias para su vida cotidiana.
Curso básico de educación para padres – un compromiso con la cultura de alianza
