LA CARTA DEL PAPA A LA JUVENTUD, Maria Fischer •
La primera respuesta vino desde Perú, por parte del P. Alberto Celis, del primer curso de la Federación de Sacerdotes de ese país. Sin muchas palabras, contestó con una foto – la foto de su edición de “Cristo Vive”, con huellas de lectura profunda. Hasta muy tarde en la noche o la madrugada romana, Hemma Struntz y Lucas Galhardo, los dos jóvenes de Schoenstatt que tienen el privilegio de participar en el XI Foro Internacional de la Juventud, grabaron un video para hacer llegar un mensaje y, en verdad, una invitación a la familia internacional de Schoenstatt: Haremos nuestra la carta del Papa a la juventud y a todo el pueblo de Dios, meditemos y reflexionemos lo que nos toque más, y compartamos en un diálogo schoenstattiano, tal como los jóvenes ahora lo hacen en Roma. —
“¡Qué lindo ver a jóvenes comprometidos con la Iglesia, que viven y que arden por ese amor a Cristo Jesús!”, comentan desde Costa Rica al recibir el video vía WhatsApp. “¡Gracias y que nuestro padre los acompañe y bendiga!”, dice Juan Fernández, el escultor del P. Kentenich.
Roberto Henestroso, de Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, ya encontró su capítulo: “El capítulo 13, al final, es muy «schoenstattiano»: dejar al hombre viejo y revestirse de un hombre «joven», rico en vinculaciones, donde, «por encima de todo esto, nos revestimos del amor, que es el vínculo de la perfección».
Jesús, el eternamente joven, quiere regalarnos un corazón siempre joven. La Palabra de Dios nos pide: «Eliminen la levadura vieja para ser masa joven» (1 Co 5,7). Al mismo tiempo nos invita a despojarnos del «hombre viejo» para revestirnos del hombre «joven» (cf. Col 3,9.10). Y cuando explica lo que es revestirse de esa juventud «que se va renovando» (v. 10) dice que es tener «entrañas de misericordia, de bondad, humildad, mansedumbre, paciencia, soportándose unos a otros y perdonándose mutuamente si alguno tiene queja contra otro» (Col 3,12-13). Esto significa que la verdadera juventud es tener un corazón capaz de amar. En cambio, lo que avejenta el alma es todo lo que nos separa de los demás. Por eso concluye: «Por encima de todo esto, revístanse del amor, que es el vínculo de la perfección» (Col 3,14).
«¡Gracias! Lo pasaré a la Juventud», dice Giuliana, de la JF de Costa Rica, y María Inés de Masi, de Argentina, escribe: «Ya le regalé a mis hijos el «Cristo vive».»
La foto enviada por el P. Alberto Celis, Perú
Nuestros jóvenes nos invitan, nos motivan, nos interpelan a hacer nuestra la carta del Santo Padre a la juventud y a todos los de corazón joven – ¿Y ahora, qué?
Si alguien todavía no tiene “Cristo Vive” como librito, aquí está el enlace a la página oficial del Vatican.
En Schoenstatt.org ya desde hace unas semanas los invitamos a compartir:
Cristo vive. Él es nuestra esperanza y la juventud más hermosa de este mundo
Saludos en Nombre de ntro. SEÑOR JESUCRISTO Y SU SANTISIMA MADRE les pido que por favor oren por nosotros aca en venzuela para que podamos realizar una pequeña hermita aca en nuestra comunidad ya que Venezuela no tiene Santuario de Schoenstatt. Estoy agradecido con la Mater porque gracias a la campaña del rosario en mi comunidad muchas familias se han sumado al Rezo del Rosario estoy muy agradecido y lleno de gozo con todo lo que me esta haciendo vivir la Mater. Feliz de pertenecer al Movimiento de Schoenstatt Bendiciones para todos se despide Osmer Cortez