CHILE, Carmen Rogers. «Virgen del Carmen Misionera llegó a la Ermita de la Mater de Punta Arenas, en el extremo austral de Chile «: Se trata de la imagen de la Virgen del Carmen, una hermosa talla del artista quiteño Ricardo Villalba, bendecida y entregada por el Santo Padre durante la audiencia general del miércoles 24 de marzo como regalo a Chile en su bicentenario y traída al país por el Cardenal Tarcisio Bertone, Secretario de Estado de Su Santidad.
La Santísima Virgen nos muestra a su Hijo
En los primeros días de abril se inició su peregrinación por el país, comenzando en las zonas más afectadas por el terremoto y llevando la Palabra de Cristo en el «Evangelio de Chile», cuyos ejemplares también bendijo el Santo Padre. «De este modo la Iglesia busca poner de relevancia que la Santísima Virgen nos muestra a su Hijo, Jesucristo, en su Palabra y nos invita a congregarnos como comunidad eucarística y solidaria», informó el episcopado.
Que su manto nos acoja y nos proteja
El itinerario de la Virgen del Carmen Misionera junto al Evangelio de Chile se debió modificar tras el terremoto y maremoto. En virtud de este suceso, serán algunos de los lugares más golpeados por la tragedia los primeros que esta imagen visite. «A través de este signo, la Madre de consuelo visita a nuestra comunidad, que se pone bajo su amparo para que su manto nos acoja y proteja, como discípulos de su hijo Jesucristo, y en esta situación de dolor nos haga portadores de Esperanza y Vida», indicó la Conferencia Episcopal.
En las mejores manos
En la tarde del 19 de abril, la imagen llegó hasta la ciudad de Punta Arenas, desde Porvenir en Tierra del Fuego. Y ¿quién tuvo allí el privilegio de darle la bienvenida?
Leamos la noticia de un informativo local:
«La imagen llegó hasta la Ermita del Movimiento Apostólico de Schoenstatt, donde fue recibida por sus miembros quienes tuvieron el honor y el privilegio de sacarla de su caja, armarla, vestirla, poner al Niño Jesús en sus brazos y prepararla para presentársela a toda la comunidad. Además, compartieron una Misa presidida por el Padre Carlos Cox, sacerdote schoenstattiano y Rector del Templo Votivo de Maipú. En su homilía el Padre Cox recalcó la importancia de que sea la imagen de María que este año Bicentenario recorra nuestro país con el Evangelio de Chile, para acercar a los chilenos a Jesús, por medio de su Madre María y de las Sagradas Escrituras».
Por la mañana, los miembros del Movimiento de Schoenstatt acompañados por muchos niños, le cantaron y rezaron un Rosario a la Virgen.
¡De seguro la Reina de Chile les regaló sus gracias en una sonrisa de mamá!
