Un nuevo curso de la Federación de Familias en Rosario

ARGENTINA, Sandra y Rubén López. Hay mucha alegría en la familia de Schoenstatt de Rosario, Argentina, por el Curso 32 de la Federación Apostólica de Familias. Este curso se forma por primera vez en la historia de la Familia de Rosario con todos sus integrantes provenientes de la ciudad de Rosario, lo cual tiene una significación muy especial para la familia, que viene rezando para que se manifiesten vocaciones desde hace mucho tiempo.

Desde el fin de semana del 8 y 9 de agosto Julieta y Emilio Ansaldi, Marianella y Mariano Denovi, Soledad y Hernán Stambuk, Patricia y Enrique Carelli, Daniela y Jorge Scarpín y sus jefes, Sandra y Rubén López, forman el nuevo curso de la Federación de Familias. Sus educadores son Ana y Oscar Clavijo. Han vivido en Mariápolis, en Paraná, una jornada de gran intensidad en los vínculos, donde se evidenció una gran entrega a la Mater y a su misión de renovar el mundo con mayor compromiso. «Vivimos momentos de cielo», cuentan emocionados.

Hubo algunas sorpresas: el sábado a la noche los visitaron representantes del curso XXXI, de Paraná, junto a sus educadores, Carla y Javier Ceballos,dándoles la bienvenida a la Federación y trayéndoles una torta de regalo.

A mediodía del domingo partieron rápidamente a Rosario para finalizar la jornada en el Santuario de Rosario, donde les esperaban, emocionados, los integrantes de la Federación del curso XV que pertenecen a Rosario.

Allí, en su Santuario, con muchos gestos y símbolos, rezaron por primera vez su oración de curso… Agradecen de todo corazón todo el apoyo en la infraestructura, cobijamiento y calidez de las familias de Rosario y Paraná, que estuvieron permanentemente a disposición del cursodurante la jornada. También le agradecen al Padre Juan Pablo su entrega de corazón, su paternidad y toda su sabiduría, al que despidieron con muchos buenos deseos en su viaje a Schoenstatt, donde participa del congreso general de su comunidad.