Publicado el 2009-08-26 In Vida en alianza

Construir familia es construir el cielo

Tu familia vale - un domingo en familia  - Fotos: Marcelo LuzardiPARAGUAY, P. Antonio Cosp. «Tupãrenda es un paraíso» decía Nadia, de cuatro años, hija de un matrimonio que viajó más de 300 kilómetros para participar de nuestro original evento: «Tu familia vale». Es un buen reflejo de lo que sucedió a lo largo de todo el domingo 23 de agosto en Tupãrenda. Nos sentimos en el cielo. Como nuestro objetivo movilizador de estos años en el Movimiento es regalar hogar quisimos promover un momento fuerte e impactante para todo el país. Es que la Nación de Dios se forja en la medida en que los hogares sean tierra paradisíaca. Como dice nuestro antiguo canto paraguayo: «Dios viva en nuestros pechos, Dios viva en cada hogar«.


Tuparenda: 7000 personas participaronHasta ahora nuestro único gran evento anual era cada 18 de octubre con unas 40.000 personas. Esta nueva iniciativa partió de la rama familiar y la organización calculaba la asistencia de unas dos mil personas. Al ver el eco tan interesado de la prensa en su conjunto tuvimos que prepararnos para más.

Las familias armaron sus casas…

Y efectivamente unas 7000 personas acudieron a lo largo del día. Unos 10 movimientos y unas 15 organizaciones sociales que tienen que ver con las familias armaron sus casas donde acogían a la gente en tres turnos con un taller bien preparado. No faltaron la pastoral para novios y matrimonios de Tupãrenda ni la Pastoral de la Esperanza para separados en nueva unión. Me gustó mucho «Un techo para nuestra patria», una ONG donde jóvenes nos explicaban su tarea compartida con los dueños de terrenos para facilitarles recursos y pudieran construir allí sus hogares. Naturalmente, todas las ramas del Movimiento tenían «su casa» y sus talleres con los más diversos temas familiares.

La Federación de Familias oferta su programa«Disfruté mucho al ver, escuchar, sentir, vivir y emocionarme con esta multitud de jóvenes, enfermos, minusválidos en sillas de ruedas, madres con sus hijos muy pequeños y sobre todo la alegría contagiante de los niños plantando sus árboles y disfrutando de un payaso lleno de vida y entusiasmo» fue el comentario de uno de los peregrinos a Tupãrenda en este día tan original.

La familia a imagen de la Santa Trinidad en su diversidad y unidad

En la misa final a las cuatro de la tarde se leyó el saludo de Su Santidad Benedicto XVI que se unía «de corazón a la celebración del jubileo de oro de Schoenstatt en Paraguay». Saludaba a las familias participantes en la jornada de este domingo en familia. «TallerConciente de que la familia a imagen de la Santa Trinidad en su diversidad y unidad es la base de la sociedad». Ya que «en ella se forman los auténticos valores humanos y cristianos que permite al hombre vivir plenamente su ser imagen de Dios». En la eucaristía coronamos a la Mater como Reina de las familias. Cerramos el día peregrinando hasta el santuario. En consonancia con la oración de coronación, unos globos elevaron hacia el cielo nuestro capital de gracias de este día.

Segundo gran hito del año jubilar

En la iglesia Santa Maria de la TrinidadEste domingo 23 de agosto se constituyó en el segundo gran hito de este año jubilar ya que el 31 de mayo fue la celebración interna de la Familia. Para esta ocasión nos visitó el P. José Manuel López Herrero, chileno, quien había estado hace 50 años en el mes de julio junto con los entonces seminaristas Hernán Alessandri y Esteban Uriburu. El riego de estos tres apóstoles dejó consolidada la semilla inicial de mayo. Una participante en su conferencia decía: «Las palabras del Padre López nos llegaron hasta las fibras más íntimas de nuestro ser». Los encuentros a lo largo de toda una semana con el P. José Manuel nos renovaron nuestra conciencia de misión al redescubrir que la Mater ha escogido con tanta predilección nuestra Patria para poner aquí su morada, su hogar.

El fruto de regalar hogar ha hecho que «hoy pudimos ver que muchos ojos brillaron, muchos corazones y muchos caminos se abrieron al sentirse hijos amados por Dios», fue la sensación expresada por muchos.

¡Aún hoy es posible vivir en familia!

Es hora de abrirnos y trabajar por la sociedad de manera mas contundente

El P. Antonio Cosp es Director del Movimiento de Schoenstatt en Paraguay

 

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