Publicado el 2017-08-27 In S18 aportes, Sinodo 18

Joven, Francisco quiere escucharte … Any Bazán, Paraguay

HACIA EL SÍNODO DE LA JUVENTUD: “Joven, Francisco quiere escucharte”  •

¡Hola a todos! ¿Cómo están? Me llamo Analía Bazán Fernández, soy de la ciudad de Pirayú, ubicada en el Departamento de Paraguarí, en Paraguay. Corría el año 2010 y con 18 años de edad participé de un taller para jóvenes que se llevó a cabo en la capilla de mi comunidad Costa Jhú, el cual fue organizado por jóvenes líderes en ese entonces de las misiones «Patria Pater» del Movimiento Apostólico de Schoenstatt. Allí, a través de esos jóvenes misioneros, conocí a la Madre Tres Veces Admirable y me enamoré de Ella. Con ellos tuve la experiencia de vivir mis primeras misiones (visitar a las familias acompañada de la Virgen Peregrina). Recuerdo que en el cierre de ese taller, los jóvenes nos comentaron su testimonio de cómo llegaron a ser misioneros e ingresaron a formar parte del Movimiento.

«Cómo quisiera ser misionera…»

Mientras hablaban yo pensaba: «Cómo quisiera ser misionera…». Era un sueño que tenía en mente desde que hice mi Primera Comunión: formar mi propio grupo juvenil y trabajar por mi comunidad. En realidad, siempre desde pequeña estuve vinculada a la Iglesia, fui catequista de jóvenes, formaba parte del equipo de liturgia pero siempre tenía un anhelo de tener un grupo de vida, una comunidad que me hiciera crecer en la fe, sentía que daba mucho pero no me nutría a mí misma.

Esa vez, los jóvenes propusieron que en Pirayú se formaran grupos de la Juventud Masculina y Femenina, que ellos nos visitarían por lo menos una vez al mes. ¡Estalló mi corazón de alegría! En ese momento veía cumplir mi sueño. Desde esa vez, le comenté de la idea a unos amigos que también tenían el mismo anhelo y así fuimos 15 jóvenes los primeros misioneros de la Reina. En octubre de ese mismo año, recibimos nuestra Imagen Peregrina y con ello pasamos a formar parte de la Pastoral Juvenil de la Campaña del Rosario. Cada uno misionaba con su Peregrina, rezábamos el Rosario con las familias. Dos años después hice mi Alianza de Amor, exactamente el 23/12/2012 en el Santuario Nacional de Tupãrenda. Una alegría inmensa me invadía, ya había intercambiado corazones con María al fin. En ese año decidí muchas cosas, esa autoeducación que aprendí del P. Kentenich me hizo ver más allá de aquel pueblo en donde nací y me crié. Decidí estudiar en la Universidad Nacional de Asunción en el turno noche mientras trabajaba de día.

Fue en ese retiro donde le conocí a mi novio

Me mudé a vivir a Asunción con unos tíos. Les convencí a mis padres, que por cierto con mucha tristeza, me dejaron ir de casa. Me las «banqué» viviendo casi de favor. En ese tiempo formé parte de un grupo de vida en la Rama de la Juventud Femenina Universitaria de Schoenstatt, del que más adelante fui encargada.

En el año 2014 participé del Retiro Nacional de la Pastoral Juvenil, que convoca a todos los misioneros jóvenes de la Campaña del Rosario del país. Fui representando a Pirayú y fue en ese retiro donde le conocí a mi novio, actual prometido y futuro esposo. Nuestro noviazgo se fortaleció en el Movimiento y trabajamos para la Campaña del Rosario juntos, en agradecimiento a Don João Luiz Pozzobon, porque fue él quien inició con este trabajo, y por supuesto a la Mater. El próximo 12 de  noviembre uniremos nuestras vidas para siempre y formaremos una familia con bases cristianas de la mano de Dios y María.

Any Bazán con su novio, Fabián Daniel López Cuevas

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1 Responses

  1. Juan dice:

    Gracias Any por compartir tu testimonio y tu historia de fe. Te deseo lo mejor a ti y a Fabián, que forméis una familia llena de amor y donde permitáis que la Mater os sigue educando y acompañando.

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